¿Hay
belleza en la vejez? ¿cómo enfrentarse a algo para lo que nunca nadie nos preparó?
¿es posible mantener la propia identidad hasta el final?... Del paso del tiempo,
de la melancolía y la nostalgia, de la soledad y el vacío, de la indefensión y
el miedo, a medio camino entre el humor y el drama, nos habla Alejandra en esta
obra -"La Velocidad del Otoño"- articulada en torno a la conversación
que, en un momento crítico de su vida, esta mujer mantiene con el más pequeño
de sus hijos.
Una
conversación dura, tierna, conmovedora, donde aflora la sabiduría, la pasión
por la vida, por el arte y la belleza de una anciana inteligente y sensible que
a toda costa lucha por mantener su independencia y su libertad "el valor más preciado, quizá el único que
tenemos". Una mujer perdida entre los restos de una vida que fue un
día alegre y luminosa y que el tiempo, lento e implacable, poco a poco le ha robado
para siempre. Una mujer que pese a todo no renuncia a su capacidad para elegir,
para decidir su futuro.
Texto
sencillo, delicado, evocador, emotivo y muy bello magníficamente interpretado por
Lola Herrera y Juanjo Artero sobre un tema difícil, profundo, muy doloroso
también por momentos.
Tal y como la describes ha de ser una obra de teatro para relajarse en la butaca y disfrutarla en todos sus matices, reflexionando. Ambos actores me gustan mucho y el tema me parece "ineludible", ya que el tiempo pasa para todos. Procuraré verla si tengo oportunidad, tengo la sensación de que me encantará. ¡Muchas gracias por la recomendación, Marta! :)
ResponderEliminarVale mucho la pena. Seguro que te gusta. Muy conmovedora.
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