Vuelven a dejarlos debajo de sus camas y apagan la luz al oír unos pasos
que se acercan, temiendo que si las encuentran despiertas sus cuentos
acaben otra vez en algún baúl del viejo desván. Poco después las niñas duermen,
un destello rompe la oscuridad de la noche y una voz pronuncia su conjuro
con el corazón paralizado, creyendo por un instante poder alcanzar lo que sabe
que nunca será suyo. Nada sucede una vez más y el hada más triste de
todos los cuentos jamás escritos se acurruca silenciosamente entre las páginas
de aquél del que no logra escapar preguntándose cómo será que alguien te
quiera.
Microrrelato para el concurso "Relatos en Cadena" del programa La
Ventana de la Cadena Ser.
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