Comprendió que los hombres mueren así, por azar, y que solo viven mientras el ciego azar los respeta
«Hammett devolvió el asesinato al tipo de personas que lo cometen por razones, no solo para proporcionar un cadáver. Hizo una y otra vez lo que solo los mejores escritores pueden hacer. Escribió escenas que parecían nunca haber sido escritas antes», dijo de él Raymond Chandler en uno de los ensayos sobre ficción detectivesca publicado primero en la revista "The Atlantic Monthly" e incluido luego en "El simple arte del asesinato".
Referente
por excelencia de la novela negra, Dashiel Hammett (1894-1961) trabajó durante
un tiempo como detective para la agencia Pinkerton y es esa experiencia la que
se halla en el origen de sus historias y de donde probablemente proceda el marcado
realismo de su estilo.
"El
halcón maltés", una de sus novelas más conocidas gracias en parte a la
adaptación cinematográfica de John Huston con Humphrey Bogart como protagonista,
aborda la investigación policial que hará seguir al detective Sam Spade la
pista de una valiosísima estatuilla cuyo rastro, perdido hace años, han recuperado
en San Francisco ciertos especuladores centrados en el mundo del Arte. Una
figura en forma de halcón, incrustada de piedras preciosas, que los caballeros
de la Orden de Malta regalaron en su momento al emperador Carlos V, objeto ahora
de deseo para los contrabandistas y para una misteriosa dama que contrata los
servicios del detective a fin de recuperarla.
Desde
ese punto de partida, el autor arma un misterio anclado a los bajos fondos,
tejido a base de medias verdades, engaños, traiciones y pistas falsas que
conducen con frecuencia a callejones sin salida, en una trama argumental
repleta de asesinatos, mezquindades, robos, corruptelas... donde el lector va averiguando
lo sucedido al mismo tiempo que el protagonista. Un puzle laberíntico donde
nada es lo que parece, con un desenlace original y sorprendente.
Con
un estilo muy sobrio, a base de pequeños detalles, Hammett logra una
ambientación, un tono y unos personajes muy particulares, ensombrecidos por un
halo de amargura y pesimismo. Y, más allá de la investigación o la resolución
del caso, lo que en realidad plantea con su historia es un conflicto ético que
deja al descubierto lo turbio de ciertos intereses y lo fácil que resulta en determinados
ámbitos burlar la ley o la justicia.
Leída
con la perspectiva del tiempo, quizá pueda parecer que la novela acumula todos
los estereotipos del género: detective cínico y desengañado, secretaria ingenua
y crédula, policías brutos y fáciles de burlar, sicarios sin escrúpulos y con poco
cerebro, mujer fatal y misteriosa... pero, en su momento (fue publicada en
1930), esta forma de definir a los personajes resultó tremendamente novedosa.
Fue la posterior repetición de tales características, tanto en cine como en
literatura, lo que dio lugar al arquetipo y lo que fue perfilando los
requisitos que darían entidad al nuevo género.
La película, muy fiel a la novela, supuso por su parte el debut como director de John Huston (hasta entonces se había centrado únicamente en su papel de guionista), obtuvo tres nominaciones al óscar y es una auténtica joya del cine negro.
Reseña publicada en la revista "Escribiendo a hombros de gigantes" de El Tintero de Oro. Septiembre 2022.
Es un referente, y lo has narrado perfectamente.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, Albada.
EliminarUna historia que marcó una época y un estilo, Marta.
ResponderEliminarSolo conozco la película de Huston que, quizás, haya impedido que el libro sea más leído.
Un fuerte abrazo :-)
El personaje de Bogart en la película es tan icónico que eclipsó la novela, sí, pero vale la pena recuperarla porque realmente es el punto de partida del género. Muchas gracias por pasar, Miguel Ángel.
EliminarIncreíble tu narración, aunque ya nos tienes acostumbrados. En verdad haces que se antoje ir a lo que te inspiró.
ResponderEliminarOye pero... Entonces tú, duermes?
Perdona, sé que no va mi pregunta con la reseña. Es que yo tengo fila de libros, y no entiendo cómo lo haces.
Besos.
Jajaja, sí, sí que duermo. Es cierto que leo muchísimo, bastante más de lo que reseño, en realidad, pero para todo hay tiempo. Un beso y muchas gracias, Maty.
EliminarTerminé ayer la novela y aún tardaré en hacer la reseña. Quiero ver la peli y hablar un poco de las dos.
ResponderEliminarAparte de los personajes estereotipados lo que más me ha llamado la atención y es prueba del paso del tiempo, es esa facilidad para enamorarse tras dos veces que se ven. Resulta de lo más curioso oír hablar de amor a un detective y a su cliente a la que ha visto en dos ocasiones. Pero no se puede olvidar que la novela es de 1929 y hay cosas que lógicamente están un poco pasadas de moda.
Magnífica y certera reseña.
Un beso
Sí, hay cosas que vistas desde ahora chirrían un poco pero hay que tener en cuenta la época, claro. Un beso, Rosa y muchas gracias. Estaré pendiente de tu reseña.
EliminarBuceando en tu reseña podemos apreciar que los artquetipos suelen tener un comienzo y en eso a Hammet de le pude considerar uno de los pioneros del género negro ya que en el cine se reprodujo este arquetipo de detective, secretaria y asuntos turbios durante largos años.
ResponderEliminarOtra gran aportación para El Tintero de Oro.
Estupendo, Marta.
Definió unos personajes tan potentes que se convirtieron en modelo para este tipo de historias aunque fue el cine en realidad lo que los hizo tan reconocibles, creo yo. Un beso, Miguel y muchísimas gracias.
EliminarLectura que tengo pendiente. En este caso, he visto la película y no he leído el libro. El cine y la literatura, esa maravillosa relación. El género de cine negro americano le debe mucho a la literatura de Hammet. Fabulosa reseña, Marta!
ResponderEliminarLe debe muchísimo, sí, prácticamente Hammet fue el creador del género. Un beso, Mayte y muchas gracias.
Eliminar¡Hola, Marta! Una nueva, y ya van..., fantástica reseña que aportas a la convocatoria. Destaco el apunte que haces sobre los clichés y la importancia de poner en contexto a los clásicos. Quitando la lupa y los salones de té de los clásicos de la novela enigma victoriana, todo lo que hoy suena a estereotipo del género lo inició Hammett. La Femme Fatal, el detective solitario enfrentado al mundo, bebedor, fumador y mujeriego, el sombrero, el abrigo... De todos ellos es responsable el gran Dashiell. Por supuesto, también de los diálogos magistrales, llenos de ironía y segundas intenciones, o de las descripciones visuales y directas al grano.
ResponderEliminarEn este último apartado quizá la descripción de Spade es de las mejores que se han hecho de un personaje, y a la par la más inútil, dado que Bogart se encargó de ponerle su rostro que poco se parece al de las V imaginado por Hammett.
Me alegra que hayas disfrutado de esta novela mítica, aunque quizá no la mejor. La llave de cristal es otra obra maestra imprescindible. Un abrazo!!
Bogart se tragó totalmente al personaje, sí, y dejó en segundo plano la novela pero es cierto lo que dices, la descripción que Hammet hace de él es magnífica. A mí me ha gustado mucho leerla y quizá no lo hubiera hecho de no ser por el Tintero así que muchas gracias a ti, David. Apunto también "La llave de cristal" que es otra que tengo pendiente. Un beso.
EliminarEs verdad que Bogar se tragó al personaje, y que es imposible no ver la cara de él cuando leemos a Hammet, pero a pesar de que el libro no me engancho en absoluto, cuestión de gustos, la descripción de los rasgos verticales del detective son magistrales, los diálogos, la ironía que destila... no puedo decir nada más. Quizás debería darle otra oportunidad al libro y releerlo, vista las reseñas estupendas de David y de la tuya, Marta.
ResponderEliminarGracias, compañera, eres una crac.
Claro, al margen de que el género negro o policiaco pueda no interesar especialmente de entrada (tampoco yo soy muy dada a este tipo de novelas) hay que reconocer esa maestría del autor, lo bien que perfila al personaje, la ironía que comentas y cómo fue capaz de hacer algo completamente nuevo en un momento en que la novela de detectives no iba más allá de Agatha Christie o Sherlock Holmes. Un beso, Isabel y muchas gracias a ti.
EliminarMuy buena reseña, Marta. No he leído el libro , pero he visto la peli muchas veces y me flipa. A mi me gustan más Chandler y Jim Thompson, que son como la versión 2.0 de Hammet. Pero ,como bien nos cuentas en tu reseña, él fue el pionero , el que marcó el camino.
ResponderEliminarExcelente trabajo.
Un abrazo.
Mil gracias, Pedro. Me alegra que te haya parecido interesante.
EliminarBuena reseña y puesta en contexto de la novela. Gracias por el trabajo que te has tomado.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias a ti, Ángel. Un saludo.
EliminarMe encanta la película, la vi antes de leer la novela y me gustaron mucho ambas. Es justo lo que tú comentas, que podría parecer una historia que condensa todos los estereotipos del género, pero es que Hammet fue uno de los grandes maestros pioneros del género que sentó las bases de la novela negra. Besos.
ResponderEliminarYo también vi primero la película y al leer la historia es inevitable tener a Bogart en la cabeza pero es una novela que marca un punto de inflexión respecto al género policíaco y que tendría luego una influencia enorme. A mí me ha gustado mucho leerla. Un beso, Mónica y muchas gracias.
EliminarHola, Marta.
ResponderEliminarLeí la novela el año pasado justo por estas fechas. La verdad es que me resultó un tanto pesada, sobre todo en la última parte. Pienso que la culpa la tiene el haber sido publicada por entregas. Ya me pasó con alguna otra realizada en esas condiciones. Es como que les sobra metraje para mi gusto. Prefiero la peli en este caso aunque le reconozca el mérito a Hammett, que todos escribís con una sola t aunque su nombre duplique letras por todos lados. Estoy refrescando la memoria para hacer la reseña que saldrá pronto, espero. Porque también quiero hacer la crítica de la peli.
Una reseña muy acertada y bien contada, como siempre. Un beso.
Hola, MJ. Pues tienes razón respecto a la segunda "t" del apellido. Ya lo he corregido. También es cierto lo que dices sobre la película, eclipsó completamente la novela pero, al margen de los criterios del género, vale la pena leerla por la brillantez de las descripciones, de los diálogos, de la ironía que desprende... Un beso y muchísimas gracias.
EliminarUna excelente reseña donde todos podemos aprender un montón. Confieso que el libro no lo he leído, tan solo vi la película que me encantó. Es muy cierto eso de que hay que poner en perspectiva el tiempo en que se escribió y que hasta entonces no había nada como ello. Fue una novela pionera y el escritor inauguró con ella una nueva corriente. Todo un mérito. Gracias por tus interesantes reseñas.
ResponderEliminarMil gracias a ti, Ana. Me alegra mucho que te haya parecido interesante.
EliminarHola, Marta. Tu reseña bien podía ser la introducción de las primeras páginas de una edición cualquiera de la novela. Un resumen muy acertado y contenido de florituras que no nos dejarían ver el árbol que es lo que realmente importa.
ResponderEliminarYo, seguro que tengo la novela, pero curiosamente la película me satisfizo tanto que no he tenido mayor curiosidad, aunque esto solo es escusa de mi desidia a la hora de leer; Y lo peor es que, LEER, me gusta.
Por cierto, en tu comienzo, me ha venido a la memoria una frase propia que usaba yo mucho: No me mates para hacerme la autopsia (y sus posibles variantes).
Saludos.
Hola, JM. Muy buena esa frase de la autopsia, jeje. Me alegra mucho lo que dices sobre la reseña y que te haya parecido interesante. Muchísimas gracias.
EliminarHola Marta. No hay edición del Tintero en el que no escribas una reseña de la novela homenajeada, en este caso el Halcón Maltés. Concisa pero sumamente clara e incidiendo en los puntos clave de la novela, para que nos hagamos una idea de lo que nos espera si nos embarcamos en su lectura o visionamos la película. Me ha resultado curioso que hasta los años 30 ese estereotipo tan típico de la novela negra no fuera tal, con lo que se puede concluir que Dashiel Hammet fue uno de los precursores del género. Un abrazo.
ResponderEliminarSí, prácticamente fue el creador del género. Le dio otro tono a la novela de detectives y fíjate el éxito que tuvo luego. Me alegro mucho de que te haya gustado la reseña, Jorge. Muchas gracias.
EliminarGenial reseña, Marta. La verdad es que los escritores que perduran a la historia tienen el handicap de envejecer, y en eso todos salimos perdiendo, aunque visto desde otra óptica, puede que eso sea una ventaja, la sabiduría compartida en otros tantas historias, ser la precedente, la pionera.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho la reseña, Marta, da ganas de volver a leer y ver la peli.
Un abrazo
Mil gracias, Pepe. Me alegra mucho que te haya gustado.
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