He sido una muñeca grande en casa de papá
Una
llamada a la puerta, la misma puerta que la protagonista cerró de un portazo
quince años atrás, marca el punto de partida de una función −segunda parte del
clásico de Ibsen "Casa de Muñecas", escrita por Lucas Hnath y
dirigida por Andrés Lima− que, tras su regreso al hogar, sitúa a Nora frente a
las consecuencias que para la familia tuvo su abandono. Convertida ahora en famosa
escritora de éxito ella vuelve a casa al cabo del tiempo para formalizar
finalmente el divorcio, provocando así un tremendo terremoto emocional,
plasmado primero en el dolor y la incredulidad de hijos y marido, que habían
llegado incluso a darla por muerta y en los reproches y recriminaciones de que
la harán objeto poco después.
Es
esta una obra que, manteniendo en todo momento el espíritu de la original,
reivindica claramente el papel de la mujer en la sociedad, que cuestiona los
roles de pareja y ciertos convencionalismos contra los que los que los personajes
se rebelan. Ambientada en los primeros años del S.XX muestra lo próxima que,
pese a lo que en ocasiones pudiera parecer, en muchos aspectos se encuentra
todavía nuestra sociedad respecto a la de aquellos años y lo poco que hemos
avanzado en realidad en materia de igualdad.
Impecables
Aitana Sánchez Gijón y Roberto Enríquez como protagonistas. También Elena
Rivera en el papel de hija enfrentada a una madre a quien no comprende ni
todavía perdona y Mª Isabel Díaz Lago como la tata que renuncia a su vida por
Nora y sus hijos.
Texto
intenso y descarnado, sin alegatos ni juicios, sin buenos ni malos. Muy
acertada la escenografía (sencilla y muy clásica) y la música que acompaña y
por momentos realza el caos emocional en que, por un motivo u otro, se
encuentran inmersos todos los personajes.
Me alegro Marta de volver a leerte reseñando teatro pues no conozco ningún blog que lo haga, y además le das un toque muy especial. Aitana Sánchez Gijón es una actriz increíble y con una vocalización admirable. Si además la obra recoge y actualiza de alguna manera el debate sobre la igualdad real, la propuesta es muy atractiva.
ResponderEliminarSaludos y buena semana.
Hola, Miguel. Sí es una obra que vale mucho la pena y ver a Aitana en directo impresiona, la verdad. Muy elegante en la forma de hablar, de moverse... Roberto Enríquez también fantástico. Muchas gracias por pasar y comentar 😉
EliminarConsidero algo muy original y acertado dar continuación a una obra escrita hace tantos años por un genial autor como Ibsen, del que leí, de adolescente, Casa de muñecas.
ResponderEliminarNo soy muy aficionado al teatro, pero este tipo de obras, realistas, sí que me gustan.
Es, pues, de agradecer esta reseña.
Un abrazo.
La obra es realmente buena y no traiciona a la original. Muchas gracias, Josep.
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