Cuando no se puede tener la realidad, bastan los sueños
Clásico
por excelencia de la ciencia ficción, "Crónicas marcianas" es un
conjunto de relatos, publicados primero de manera independiente y unificados
luego en 1950 a modo de novela, con el que Ray Bradbury narra las primeras
invasiones terrestres a Marte y la posterior colonización del planeta.
Sin seguir una línea argumental definida, con
historias autoconclusivas y muy puntuales referencias comunes entre los relatos,
la narración aborda los veintisiete años comprendidos entre 1999 y 2026,
periodo durante el cual se produce la colonización.
Construye
así Bradbury un mundo de ficción teñido de pesimismo e ironía con el que nos
incita a reflexionar sobre temas como la soledad, el miedo a lo desconocido, la
muerte, la guerra, la ambición, el egoísmo... y bajo el que late una aguda
crítica hacia los avances tecnológicos y la deriva que parece haber tomado la
humanidad.
Hay
que tener en cuenta en ese sentido el contexto en que fueron escritos estos
relatos, pocos años después del final de la Segunda Guerra Mundial y bajo la
amenaza cierta de una posible catástrofe nuclear. De ahí la idea de una
civilización que se extingue y busca refugio en otro planeta.
Predomina
en todos los cuentos un tono melancólico, muy poético por momentos y cierta
sensación de decadencia. Todos revelan también la preocupación del autor por el
futuro, su desengaño presente y el anhelo, quizás, de una vida más sencilla
alejada de la modernidad.
Bradbury
coloca al ser humano ante un espejo y lo enfrenta a sus miserias, a su pequeñez
e impulso autodestructivo, ofreciendo con ello una visión muy oscura de su
naturaleza, cargada de amargura y desconfianza, que trata sin embargo de
aligerar con escogidas y brillantes pinceladas de humor negro y algunos cómicos
malentendidos.
Pese
a su sencillez estructural, el mensaje de fondo de todos los relatos es muy
profundo, sutil en muchos de ellos y claramente desencantado.
Obra
turbadora en su conjunto, repleta de poesía y de misterio, con descripciones de
gran belleza que dan un tono muy especial al paisaje y a la atmósfera de Marte y
una crítica apenas encubierta hacia el materialismo y el aislamiento
tecnológico a que parece abocado el ser humano (gran visionario Bradbury en
este aspecto) que quizá requiera una lectura entre líneas pero que fácilmente
se advierte tras ellas.
Reseña
publicada en el nº 8 (abril 2020) de la revista "El Tintero de Oro
Magazine"
Hola Marta. Muchas gracias por este aporte que completa la biografía hecha por los compañeros Raquel y David Rubio.
ResponderEliminarYa comenté que leí para este reto "Crónicas Marcianas", y es verdad que destaca Bradbury lo que tan bien apuntas: sencillez estructural y desencanto.
Ha sido unaa rodan estupenda en la que he aprendido mogollón. Gracias Martita.
Hola, Isabel! Muchas gracias a ti. Yo también he aprendido muchísimo con este reto. Nunca he sido una gran lectora de ciencia ficcion y la verdad es que me ha encantado descubrir a Bradbury. Un beso grande.
EliminarHola, Marta.
ResponderEliminarUna de las claves del éxito de Crónicas Marcianas la has definido de manera lúcida: Bradbury coloca al ser humano ante un espejo. Es un libro que en cualquier caso puede tener una doble lectura. Una divertida y fantasiosa para dar lugar a una posterior reflexión que nos ponga ante el espejo citado.
Excelente aporte para El Tintero de Oro.
Un beso desde la superficie marciana :)
Esa doble lectura es lo que la hace tan interesante y la poesía y el desencanto que recorre todos los relatos. Un beso, Miguel y muchísimas gracias.
EliminarMuy buena reseña, Marta. Entre lo que nos contó David en su entrada de ayer y esta reseña, creo que me habéis convencido para leer la novela y mira que no era algo que me apeteciera mucho. De hecho, no me comprometí a participar con reseña por esa desgana con el libro. Gracias por la tentación.
ResponderEliminarUn beso.
Hola, Rosa. Pues seguro que te gusta. Yo tampoco soy muy de ciencia ficcion y me ha encantado. Un beso.
EliminarHola Marta. Me ha gustado mucho la forma en que has enfocado la reseña del libro "Crónicas marcianas". Melancolía y crítica hacia la Humanidad son las bases de estos cuentos que nos regala Bradbury, que con excusa de la colonización del planeta Marte no deja piedra sobre piedra.
ResponderEliminarUn abrazo enorme.
Una crítica tremenda la que hace Bradbury, sí, con una visión muy desengañada de la humanidad. Un beso, Bruno y muchísimas gracias.
EliminarMe ha gustado mucho leerte esta reseña, Marta. Como hemos leído el libro para el reto y los relatos de los compañeros, creo que estamos más abiertos y sensibilizados para leer sobre Bradbury. Mientras te leía, pensaba en el acierto de David por elegir un libro como este y más, que ni él ni nadie sabíamos que lo íbamos a trabajar confinados por una pandemia donde todo cobra nuevo sentido. Hablas de un mundo "un mundo de ficción teñido de pesimismo e ironía con el que nos incita a reflexionar sobre la soledad, el miedo a lo desconocido, la muerte... y bajo el que late una aguda crítica hacia los avances tecnológicos y la deriva que parece haber tomado la humanidad." Y yo me pregunto, ¿no es nuestra propia realidad? ¿la de aquí y ahora?
ResponderEliminarPor eso me ha gustado tanto leerte, porque lleva a la reflexión compartida. Porque te das cuenta que tu pensamiento coincide con el de otros. Y así la soledad y la falta de esperanza en esta humanidad es más llevadera.
Un beso, Marta.
Hola M.Pilar. Es cierto que son historias muy apropiadas para estos momentos, cuentos que ayudan a reflexionar y a comprender mejor ciertas cosas. Al final la literatura siempre nos salva o ayuda, al menos, a vivir. Un beso grande y mucho ánimo.
EliminarQué estupenda reseña, Marta. Es concisa, amena y muy esclarecedora. Confieso que no he leído la archiconocida novela, pero tras leerte a tí creo que no puedo ni debo dejarla pasar. Me llama mucho la atención la integración de ciertos elementos que mencionas y que no me parecen fáciles de alinear, tales como el desencanto, la comicidad, la nostalgia, la visión futurista, etc. Lo dicho, ¡ha llegado el momento de leerla! :))
ResponderEliminarUn beso enorme y gracias por un trabajo tan bueno.
Mil gracias a ti, Julia. Me alegro mucho de haberte despertado la curiosidad. Un beso grande.
EliminarMira por dónde, creía que la historia iba en sentido contrario: que la Tierra recibía una invasión marciana al estilo de La guerra de loa mundos.
ResponderEliminarPero poco importa, pues tal como describes esta obra, casi que me resulta todavía más atrayente la temática. A raíz de esta última convocatoria de El tintero de oro, la he comprado, pero la tengo endiente de leer.
Un abrazo.
Pues seguro que te sorprende. Es realmente una novela que hay que leer. Un beso, Josep.
Eliminar¡Hola, Marta! Decía Bradbury que el siempre usaba la fantasía como mero gancho creativo para, en el fondo, hablarnos del ahora, de nuestro ahora. La voz propia que consigue en sus historias la consigue de dos formas. Primero de una gran personalidad creativa, era capaz de ver una historia a partir de ideas o imágenes que nada tienen que ver unas con otras; por otro lado, de su faceta más desconocida: la de poeta.
ResponderEliminarEn lo personal, este es uno de esos autores inspiradores. En épocas de sequía de ideas, releer sus relatos es como inyectarte la dosis necesaria para volver a imaginar. Fantástico reseña la que nos has regalado para este mes, Marta. Un fuerte abrazo!!
Es cierto, son historias llenas de poesía y muy pegadas a la realidad contra lo que quizá pudiera esperarse. No había leído mucho a Bradbury hasta ahora y me ha encantado descubrirlo. Un beso y muchas gracias, David.
EliminarExcelente reseña, amiga Marta, escrita con tu habitual sensibilidad. Un trabajo meticuloso que no tiene precio y que te agradezco hasta el infinito... y más allá.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo virtual.
Ay! Yo sí que te agradezco este comentario hasta el infinito y más allá 😉 Un beso, Patxi. Mil gracias.
EliminarEstupenda reseña Marta. A pesar de que la ciencia ficción no es uno de mis géneros preferidos y algo he leído, para mi gusto unas cosas mejores que otras, después de leer tu crónica voy a intentar bajarla y leerla.
ResponderEliminarCuídate!
Hola, Norte. Pues me alegro de haberte despertado la curiosidad por estos relatos de Bradbury. A ver si te gustan. Un beso y muchas gracias.
EliminarA Bradbury lo leí en la facultad. Lectura obligatoria. No fue este título pero sentí que no estaba preparada para aquella lectura y esa sensación no ser una lectora a la altura, me ha acompañado desde entonces. Sin embargo, tu reseña me ha hecho replantearme esa visión. Lo mismo le doy una oportunidad. Pero no ahora, que ando con la cabeza demasiado embotada para lecturas de este tipo. Besos y gracias por la reseña.
ResponderEliminarGracias a ti, Marisa. Me alegro mucho de que te haya interesado. Besos.
EliminarAl poco de empezar a leer este libro sentí como propias sus reflexiones y me vi raptada de inmediato a su galaxia narrativa con la magia suficiente como para ser parte de las diversas expediciones a Marte que desde nuestro planeta nos ofrece este genio de la ciencia ficción.
ResponderEliminarFue un flechazo a primera vista descubrir a este autor, capaz de dibujarnos todo tipo de escenarios surrealistas a lo largo de su brillante novela.
Me ha gustado mucho tu trabajo de documentación y síntesis del libro, por lo que he disfrutado leyéndote.
Coincido en considerar a Ray Bradbury un visionario. También me parece un filósofo preocupado por el futuro de la humanidad.
Un beso, Marta.
Mil gracias, Estrella. Me alegra mucho que te haya gustado y te haya resultado interesante. Un beso.
EliminarHola Marta, una lectura estupenda y me alegra mucho, por esa visión que tienes de ese libro y de Bradbury. Qué interesante. Cómo afectan las circunstancias para esa escritura turbadora del autor. Una guerra mundial es para no ver las cosas de forma muy optimista, y es lógico, como comentas, que haya amargura y desconfianza en sus historias. El que se extrapole a la actualidad no es nada raro. Cualquier acontecimiento que afecta a nuestras vidas, nos hace sentir más solos, nos crea incertidumbre, tenemos miedo a lo que ocurre y ocurrirá, nos produce ese desasosiego. Curiosamente, en estos días he terminado de leer los relatos para el Tintero, y esos matices, nada halagüeños, se perfilan en nuestros escritos. En cuanto a la vida más sencilla, es igual. Los pueblos aislados son los que llevan una "vida normal" cerrando entradas y salidas, dependiendo del campo, de la naturaleza, el aire que respiran. Toda esa huida a la ciudad, ha supuesto que ahora estemos más "encerrados" si cabe, en nuestras cuatro paredes y en nosotros mismos planteándote muchas cosas, dudas existenciales. Ya ves ha sido leerte y no paro de escribir. Gracias compañera por esta reseña. Un abrazo y feliz día.
ResponderEliminarEs cierto que el miedo y la incertidumbre se cuelan casi sin pretenderlo entre las líneas de cada escrito. El tono, la desesperanza, el matiz crítico... todo eso es fruto de la realidad a la que se enfrenta el escritor y en el caso de Bradbury se ve muy claramente. Muchas gracias a ti, Emerencia. Me alegro muchísimo de que te haya gustado la reseña. Un beso.
EliminarLa época en la que se publicó Crónicas Marcianas, al final de la segunda Guerra Mundial, tuvo que tener sin duda un efecto clave en la visión que los escritores de la época, y la población en general, tenían al imaginarse el futuro de la humanidad. Estableciendo un paralelismo, esta misma edición del Tintero se ha visto afectada por la pandemia que nos toca vivir, con relatos varios de corte apocalíptico y centrados algunos de ellos en la amenaza vírica.
ResponderEliminarExcelente reseña, Marta, bien documentada y estructurada. Un abrazo.
Hola, Jorge. Así es, el desencanto y la desesperanza de los relatos de Bradbury tiene mucho que ver con la época que le tocó vivir y también es cierto lo que dices respecto a los relatos de esta convocatoria del Tintero, era inevitable... Me alegro mucho de que te haya gustado la reseña. Muchísimas gracias.
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