Me llamo Bond, James Bond
Quinta novela de la saga, Desde Rusia con amor fue publicada en 1957 en pleno auge de la guerra fría, tema omnipresente a lo largo de una trama repleta de espías, engaños, emboscadas, agentes secretos, mensajes cifrados...
El asesinato de Bond proyectado por Smersh, agencia de espionaje soviética, es el punto de partida de una historia donde 007 se convierte en objetivo de un complot con el que los rusos pretenden desacreditar al servicio secreto británico, humillarlo matando a su mejor agente y convertirlo en hazmerreir del mundo.
La
preparación del asesinato, la selección del mercenario, el cebo de la bellísima
agente rusa que debe enamorar a Bond, centra la primera parte de la novela y
sitúa el contexto político de una historia que gana agilidad conforme avanza y
se suceden los episodios que llevarán a la resolución del conflicto.
Reclutado
en 1939 por la División de Inteligencia Naval donde sirvió durante toda la
Segunda Guerra Mundial, Ian Fleming (1908-1964) se basó en sus propias
experiencias como oficial de inteligencia y en los datos a que por su labor
tuvo acceso para perfilar al agente secreto más famoso de todos los tiempos, un
mito que ─sobre todo gracias al cine─ aún se mantiene vivo y es absolutamente
reconocible.
Leída en la actualidad, no obstante, la novela
se siente algo lejana: el tema de la guerra fría, el papel de las mujeres y el
trato que reciben tanto por parte del protagonista como de los secundarios
(duelen algunas frases de puro machistas, pese a que no hay que perder de vista
época y contexto), la división tan marcada entre buenos y malos, la dejan
anticuada y le dan un tono heroico muy propio de los años en que fue
escrita pero que no resiste del todo bien el paso del tiempo.
Aventura, en cualquier caso, entretenida y repleta de giros argumentales que disfrutarán los amantes del género.
No hay nada como la propia experiencia para poder escribir un libro con el espionaje de fondo. Ahora bien; aunque adaptadas al cine funcionan a la perfección también cabe decir; temperatura de Fleming siempre llevó un poco de propaganda política y un cierto aire maniqueísta entre rusos y estadounidenses. Pienso que lo ha reflejado a la perfección en esta estupenda reseña.
ResponderEliminarUn beso, Marta.
Sí, hay mucha propaganda política en estas novelas por la época en que fueron escritas y por eso no resisten bien el paso del tiempo, creo yo. En cualquier caso son entretenidas y fáciles de leer. Un beso, Miguel y muchas gracias.
Eliminar*lo de temperatura es literatura; se ve que comienza a apretar el calor 😅😎
ResponderEliminarSí que aprieta, sí, jeje.
EliminarMagnífica reseña Marta. Fíjate que jamás había tenido tentaciones de leer a Ian Fleming porque, como digo en mi reseña (la publicaré un día de estos), aunque me gusta el género de espías, lo poco que he visto en película sobre James Bond me ha quitado las ganas. Pero me he encontrado con una novela entretenida, muy bien escrita, con unos personajes muy bien narrados y dibujados, una trama trepidante... Y sí, hay machismo y prejuicios de occidente hacia el bloque soviético, pero es que en 1957 no vamos a pretender otra cosa. Hasta creo que leeré la siguiente entrega porque tal y como termina esta...
ResponderEliminarUn beso.
Sí, es una historia muy entretenida y muy pegada a su tiempo, no hay que perder eso de vista leyéndola ahora. Un personaje único al que yo tampoco me había acercado nunca. Un beso, Rosa y muchas gracias. Estaré pendiente de tu reseña.
EliminarEstaba deseando que alguien publicara la reseña de este libro. Yo todavía estoy leyéndolo y me está costando hacerlo. Has resumido en unas cuantas frases lo que me está pareciendo este libro: anticuado en forma y fondo, machista, e incluso no demasiado bien escrita, donde los adjetivos producen sobredosis por momentos. A pesar de ello puede ser entretenida, la primera parte no. Un autor que no creo que repita. Creo que dijo un amigo suyo que Fleming era un misógino. Aquí queda claro.
ResponderEliminarUn reseña excelente. Lo condensas todo de maravilla.
Un beso.
Sí, es eso. Una novela entretenida pero muy anclada a un tiempo concreto. Leída ahora chirría un poco y ciertas actitudes llaman muchísimo la atención. Un beso, MJ, y mil gracias.
EliminarHola Marta, fíjate que tiene mi marido casi todos los libros y nunca me ha dado por leerlos, no sé si alguna vez me animaré. Buena reseña.
ResponderEliminarUn abrazo. ☺️
Muchas gracias, Merche. Contenta porque te haya gusado la reseña.
EliminarHola... esta fue la primera novela de la serie que leí, mucho después de conocer a Bond en el cine. Aun me siguen pareciendo entretenidas aunque, tienes razón, los tiempos cambian y a lo mejor el agente 007 de los 60s no sería muy bien recibido hoy en aquellos sitios de alto nivel que frecuentaba y, tal vez, no tendría tanto éxito con la féminas... o a lo mejor si, nunca se sabe.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Octavio. Yo no lo había leído hasta ahora y tampoco me he acercado mucho al personaje a través del cine, quizá me ha pillado un poco tarde para cogerlo con más entusiasmo pero lo he sentido algo distante, sí.
EliminarHola, marta, una reseña estupenda donde quedan claros los tiempos en los que se dieron los hechos. Hay libros de Literatura que ganan con el tiempo, no es el caso. Yo también pienso que los libros de Iam Fleming referentes a James Bond el paso del tiempo les pasa factura.
ResponderEliminarUn abrazo.
El mundo y las sensibilidades han cambiado tanto que esta historia se ha quedado un poco anticuada, sí, aunque es entretenida y a los fans del género de espías seguro que les sigue entusiasmando. Un beso, M. Pilar, y muchas gracias.
Eliminar¡Hola, Marta! Cuando has comentado que está un tanto desfasada mencionando la guerra fría, el machismo y el maniqueísmo la verdad es que me he quedado pensando que en realidad son tres temas que hoy son de "rabiosa actualidad" como diría García. Vivimos en una época de Guerra Fría con USA-Unión europea por un lado y Rusia y China por otro; la palabra machista sale cada día veinte veces en los telediarios y la política actual se mueve entre buenos, los míos, y malos, los otros. Así que no sé, je, je, je...
ResponderEliminarFleming lo tengo un tanto desatendido, de hecho conocí un poco de su vida cuando realizamos el homenaje a Roald Dahl y entonces conocí que compartieron preparación en el servicio secreto.
Una estupenda reseña. Un abrazo!!
Hola, David. Sí, esos temas siguen vigentes pero la forma de tratarlos sería muy diferente ahora. No sé, el tono de la novela, el perfil de los personajes... eso es lo que me ha parecido que queda anticuado. Es una historia anclada a un tiempo muy concreto, creo, y leída ahora no me ha parecido que resista bien el paso de los años. Aunque ya digo que es entretenida y a los fans del personaje les seguirá encantando. Un beso y muchas gracias.
EliminarPero qué inetresanet la historia, me encantó cómo la narras.
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegro, Albada. Muchas gracias.
EliminarYo creo que este tipo de lteratura, en el marco que se encuadraba, no se alejaba mucho de la prpaganda, como el cine nazi o el yankee en sus respectivas epocas. El personaje "utiliza" tanto personas como circunstancias para su beneficio, en el mas amplio de los sentidos del entrecomillado.
ResponderEliminarYo no recordaba el argumento, pero parece entretenido, y poco mas hace falta. Los chirridos no solo de expresiones, tambien de actitudes, deben ser ensordecedores.
abrzo, fuerte, Marta
Realmente ensordecedores, sí, esos chirridos. Cuesta un poco abstraerse de ellos y por eso digo que la novela no ha envejecido bien. Hay que tener presente en todo momento el contexto en que fue escrita y tratar de no prestar atención a ciertas cosas. Aún así, Bond es mucho Bond y la historia es entretenida. Muchísimas gracias, Gabiliante.
EliminarA mí, las historias de James Bond nunca me han llamado la atención. Ni en cine ni en literatura. No sé, hay "fenómenos" literarios (me pasa igual con Alicia en el país de las maravillas) que no me atraen nada. Así que, me parece que esta serie la dejaría pasar. En cualquier caso, siempre es bueno que nos acordemos de estos "clásicos". Besos
ResponderEliminarHola, Marisa. Sí, este es un género muy concreto que no gusta a todo el mundo y esta historia en particular yo la he sentido algo anticuada ya, aunque el personaje es todo un mito y sigue de actualidad. Besos y gracias por pasar.
EliminarSin entrar en la guerra fría, machismo o maniqueo, a mi me gustan las películas James Bond.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola, Conchi. Pues entonces te gustará mucho la novela, si te animas con ella. Un beso.
EliminarComo siempre, una buena síntesis. Me ayuda el saber tu opinión de que no resiste el paso del tiempo debido a los clichés aunque resulte entretenida. Aun así a los fans del género les gustará.
ResponderEliminarGracias por el trabajo.
Besos :)
Un beso, Maite. Muchas gracias a ti.
EliminarHola de nuevo, Marta. Pues no puedo estar más de acuerdo con tu reseña. La forma en que se trata a la mujer es totalmente censurable aunque, como bien dices, hay que entender esta novela como reflejo de una época.
ResponderEliminarMuchas gracias por completar el reto dedicado a James Bond y a su padre literario.
Un abrazo enorme.
Muchas gracias a ti, Bruno. Ha sido un reto muy chulo.
EliminarHola Marta. Hay que reconocer que Fleming llevaba tras de sí una trayectoria en el servicio secreto que le dio un bagaje estupendo para aproximarse a este género, y aunque se trata de literatura y por tanto es ficción, no deja de reflejar aspectos reales de ese mundo. Quizás el maniqueísmo entre buenos y malos le resta atractivo porque ciertamente la realidad no se mueve nunca en esos términos, aunque es un tema recurrente también en nuestros días tanto en política como en otros aspectos más cotidianos de nuestra realidad social, en el que se tiende interesadamente a identificar bandos como absolutamente buenos o malos, escapando del esfuerzo de desentrañar la complejidad de las relaciones tanto sociales como geopolíticas. Un abrazo.
ResponderEliminarSí, ese maniqueísmo sigue vigente, es cierto, pero el tono de la novela en general es muy propio de la época y no ha envejecido del todo bien, creo yo. La aventura, de todas formas, es muy entretenida. Muchas gracias, Jorge, por pasar.
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