«Ya
estoy en casaaaa...»
El
redoble de un trueno en los cristales la sacó del sueño y rompió la pesadilla.
«Lauraaaa,
Cristinaaaa...»
Despertó
sobresaltada, presa del pánico y empapada en sudor.
«Niñaaas...»
Secó
de un manotazo las lágrimas que corrían por su rostro y trató de serenarse. Si
tan solo lograra extirpar aquella maldita voz de su mente...
Respiró
hondo. A su lado, las chiquillas se removieron inquietas. También ellas lloraban
en sueños cada noche pero pronto olvidarían, se consoló con un suspiro. Todo:
el miedo, el monstruo, las heridas...
«Solo
ha sido un sueño, pequeñas −musitó la madre con dulzura−, un mal sueño».
El espectral destello de un relámpago tiritó
en la habitación y tiñó las sombras de ceniza. Se incorporó para arroparlas y
entonces...
Un
espasmo de terror enmudeció de pánico su garganta.
Quiso
gritar y no pudo.
Y lo que vio la dejó paralizada.
(Continuará)
Relato
publicado en el nº 13 (abril 2021) de la revista "El Tintero de Oro
Magazine"
Joder Marta,... ya se que "los niños no lloran",... pero acabo de encender todas las luces de casa,... jajaja
ResponderEliminarMuy bueno!
Jajaja, pues misión cumplida si te ha provocado esa sensación. Muchas gracias, Norte.
Eliminar¡Hola, Marta! Con ese continuará, me acabo de dar cuenta de lo puñeteramente odioso que es este reto para los lectores. ¡Por Dios! Anticipas maravillosamente la amenaza de ese maltratador, al que inconscientemente he puesto la cara de Jack Nicholson. Con eso, el lector es consciente del horror que vivieron y el que puede volver a pasar justo cuando ella despierta y observa la presencia que todos podemos intuir, y que nos deja postrados a la pantalla buscando por todos los lados un indicio de continuación. Fantástico. Un fuerte abrazo!!
ResponderEliminar¡Ay! ¡Muchas gracias, David! Qué bien que te haya gustado y te hayas quedado con ganas de más. Ese maltrato está latente, sí y el final no augura nada bueno...
EliminarMarta, Marta,¿podrías venir a tranquilizarme, por favor? Estoy temblando por el dolor ajeno que se vuelve propio de tan bien descripto.
ResponderEliminarMis más temerosas y temblorosas felicitaciones. (Algo así como:"escribes tan bien que da miedo").
Un abrazo
¡Ay, Juana!Tu comentario me ha hecho sonreír. Es precioso lo que dices. Muchísimas gracias!
Eliminarintenso micro, Marta. Los truenos, el ambiente, la idea del monstruo. Todo jugando entre sí para prepararnos para lo peor.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Mirna. Me alegro mucho de que te haya gustado. Muchas gracias!
EliminarMe encantas ,me gusta como escribes
ResponderEliminartan claro que llega
tan intenso que me aturde
Pues muchas gracias. Me alegro mucho de que te haya gustado el cuento.
EliminarMe parece excelente relato, en esas pocas lineas se pinto una escena de verdadero suspenso y terror, y ahora que continua no sabemos si el mounstruo se materialiso o si hay escapatoria para las damas.
ResponderEliminarY por cierto hermosa pintura para ilustrar.
Pues mucha escapatoria no parece que haya, no... Muchísimas gracias, Hugo. Me alegro un montón de que te haya gustado.
Eliminar"Solo ha sido un sueño"..., terrible pesadilla que se repite insistentemente. Veremos cómo termina. Esperemos que no sea como la realidad nos suele mostrar, porque la cosa va en serio.
ResponderEliminarMuy bien relatado. Felicidades.
Un abrazo.
Una tristísima realidad... Muchas gracias, Isan. Muy contenta porque te haya gustado.
EliminarQué terrible tiene que ser despertar cada noche con la misma pesadilla y la posibilidad de que un día se haga realidad... otra vez.
ResponderEliminarUn beso.
Una realidad muy angustiosa y muy trágica. Un beso, Rosa y muchas gracias.
EliminarCaramba, Marta, me has dejado desconcertado. Creía que ese mal sueño era porque recordaba a su esposo fallecido cuando llegaba a casa y que las niñas acabarían, con el tiempo, superando esa pérdida. Pero ese desenlace fantasmagórico que has añadido me ha dejado con la boca abierta y con ganas de conocer esa continuación que seguramente no llegará, je,je.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hola, Josep. Fallecido precisamente no está el hombre, no y el desenlace no se presiente nada bueno... Un beso y muchas gracias.
EliminarMarta que situación tan terrorífica están pasando tus protagonistas, a saber que habrá visto para quedarse paralizada, uff me temo lo peor.
ResponderEliminarEse continuará nos dará la respuesta.
Un abrazo
Puri
Hola, Puri. Pues nada bueno tiene que haber visto... Un beso y muchas gracias.
EliminarMe ha gustado mucho ese ambiente sórdido y agobiante que acompaña la escena con la tormenta de fondo, donde poco a poco vamos visualizando la tragedia y el horror. A medida que avanzaba la lectura se me ha pasado por la cabeza también la película El resplandor con la imagen del psicópata interpretado por Jack Nicholson.
ResponderEliminarNo hay peor pesadilla que esta se haga realidad y no exista escapatoria.
¡Felicidades, Marta!, reto superado con este cliffhanger que quita el sueño.
Un abrazo.
Hola, Estrella. Qué bien que te haya gustado! Un beso y muchísimas gracias!
EliminarUn micro redondo, Marta. Cuentas mucho en pocas palabras; estremece imaginar el drama que se vive tras esta historia. Me dejas con un nudo en la garganta esperando el desenlace.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchísimas gracias, Carmen. Me alegro mucho de que el cuento te haya removido. Un beso.
EliminarDespertar de una pesadilla para entrar en otra puede ser mucho para cualquiera 🖐
ResponderEliminarPesadilla convertida en realidad...
EliminarTerror en estado puro, Marta. Has sabido utilizar el título como parte del micro para hacernos entender que la pequeña familia huye de…imagino del dueño de la voz perentoria que llama a las niñas.
ResponderEliminarUn micro con substancia, Marta.
Un terror que encontramos tristemente a la vuelta de cada esquina... Muchas gracias, Isabel. Me alegro mucho de que te haya gustado.
EliminarJo, Marta. Me ha dejado muy mal sabor de boca este relato. Si que es verdad que una de las mejores formas de describir una situación así es un mal sueño o pesadilla. No sé si lo continuarás, si no es así, me ha gustado imaginarme un final feliz para tu protagonista.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Ojalá alcancen ese final feliz. Muchísimas gracias, Ana.
EliminarMarta, um excelente começo! Soubeste crias expectativa! Vou aguardar ansioso pela continuação!
ResponderEliminarSaludos!
A.S.
Pues muchas gracias. Encantada de que te haya gustado.
EliminarEspero que por el bien de la familia no fuera al mismísimo maltratador con el que soñaba la mujer. Un ser sin escrúpulos ni conciencia al que se le supone al acecho de sus víctimas.
ResponderEliminarEso si que es terror duro y verdadero.
Un abrazo.
Terror absoluto, es cierto. Muchas gracias, Francisco.
EliminarSi el maltrato en las mujeres adultas es una pesadilla, cuando hablamos ya de niños incluidos en estas trágicas y realistas historias se me ponen los pelos de punta. Has reflejado muy bien la verdadera cara del terror. Enhorabuena por el relato, Marta.
ResponderEliminarBesos.
Hola, Miguel. Terrorífico, sí, porque tiene mucho de real pero me alegro de que te haya removido un poco. Un beso y muchísimas gracias.
EliminarHola Marta, el horror se pinta en trazos, en aúllos de palabras, corre por la habitación hasta abrazar a esa madre y sus niñas. Si todo quedara en una invención, pero cuánta realidad (por desgracia) reflejas. Muy bueno. Gracias. Un abrazo compañera.
ResponderEliminarHola, Emerencia. Muchísimas gracias. Qué bien que te haya gustado!
EliminarMarta muy bueno tu micro, has plasmado perfectamente la sensación de pánico y de acorralamiento, que el miedo en grado sumo puede causar en la psiquis humana, y los recuerdos y experiencias dolorosas nos impiden podar o sacar de raíz ese terror, aumentando esa sensación de impotencia para dejarlo atrás, enfrentarlo o vencerlo.
ResponderEliminarUna historia tan real como la vida misma. Tus letras tienen magia para multiplicar las palabras que no se dicen y las emociones que encierran.
Buen fin de semana.
¡Qué bonito lo que dices, Harolina! Un beso y muchísimas gracias!
EliminarPero bueno..., que nos dejas con la miel en los labios jejeje. Muy buen texto. Gracias Marta. Besos
ResponderEliminarHola, Marisa. Qué bien que te haya gustado! Muchas gracias!
EliminarNo hay mayor miedo que ese que nace dentro de nosotros y no somos capaces de controlar. Y tu lo has sabido plasmar a las mil maravillas. He sentido como tiritaban tus personajes y yo con ellos. Un mal sueño que se repite una y otra vez y no se puede parar, ¡a ver quién se va a dormir! Buenísimo Marta, te felicito.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Pepe. Muy contenta porque te haya gustado.
EliminarHola Marta
ResponderEliminarExcelente cómo transmites la sordidez e intensidad de un ambiente angustioso. Deseando que, lo que quiera que viese la madre, no la dejase paralizada del todo. Un abrazo
Me alegro mucho de que te haya gustado, Matilde. Muchas gracias.
EliminarAnda, niña, que lo has dajado como para no continuarlo; aunque sea yo el menos indicado para hablar, porque yo en el mío no pienso darle otro valor a la palabra "continuación" que una exigencia de las normas del concurso, sin obligación a cumplir su significado.
ResponderEliminarMuy bueno.
(Si esta vez no se queda el comentario, renuncio, que ya van tres).
Jajaja. Hola, Chema! Pues me alegra mucho que te haya quedado esa sensación. Al borde del abismo las he dejado, sí. Ya veremos si continúa... Muchísimas gracias!
EliminarHola, Marta!
ResponderEliminarEncantador relato. Mucho suspenso y terror, me ha gustado muchísimo.
Mil gracias, Yessy! Cuánto me alegro!
EliminarFelicitaciones Marta, la voz narrativa que propones aún distanciada de la escena transmite la tensión necesaria para que el lector perciba el miedo de los personajes. Gracias por el aporte.
ResponderEliminarUn abrazo y salud
Hola, Javier. Pues contentísima porque te haya gustado. Mil gracias!
Eliminar!Hola, Marta.!
ResponderEliminarEl terror se palpa con claridad en cada línea, y que bien descritas esas sensaciones que producen las heridas en el alma, en la mente, en todo el ser.
Muy bueno, felicidades.
Besos;)
Muchísimas gracias, Mila! Muy contenta porque te haya gustado.
EliminarQué triste, pobre mujer y sus hijas. En caso de que el que esté allí sea el fantasma del muerto al que extraña, ojalá pueda perderle el miedo. Buen microrrelato. Un abrazo.
ResponderEliminarMuchas gracias, Cyn. Me alegra que te haya gustado.
EliminarHola, Marta. ¡Menudo susto! Has sido capaz de crear un clima muy interesante, donde la tensión es un personaje más. Un abrazo.
ResponderEliminarDisculpa, soy Beri.
ResponderEliminarHola, Beri. Me gusta mucho lo que comentas sobre la tensión. Mil gracias!
EliminarHola Marta. Desde luego, no hay peor relato de terror que la propia realidad. Somos los peores monstruos que se puedan crear.
ResponderEliminarMuy buen micro. Felicidades.
Muchas gracias, Bruno. Qué bien que te haya gustado!
Eliminar¡Hola! Un relato inquietante, enfocado al género de terror y que fluctúa entre lo onírico y la realidad. Ese doble juego lo hace muy interesante y, además, has creado una atmósfera en la historia muy inmersiva, lo que hace que quieras saber más allá de ese continuará sí o sí. Buen micro.
ResponderEliminarUn abrazo :)
¡Muchas gracias! Contentísima porque te haya gustado.
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